Con los envases flexibles debemos satisfacer dos objetivos fundamentales:
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- Facilitar su maquinabilidad y procesamiento en la planta productiva.
- Preservar el producto desde que es envasado hasta que es usado por el consumidor final. Incluyendo las etapas de transportación, almacenamientos y exhibición.
Muchas de las propiedades deseables por el consumidor de un producto, está íntimamente relacionadas con las propiedades de la estructura de su envase flexible.
Algunas propiedades importantes más importantes de un envase flexible son: La resistencia mecánica, resistencia mecánica a la perforación, resistencia térmica, barreras, sellabilidad, imprimibilidad y versatilidad de fabricación.
Procesos de fabricación de envases flexibles
La fabricación dependerá de la complejidad del envase. En los procesos básicos de conversión tenemos:
- Laminación: En este proceso, un substrato es adherido a otro mediante aplicación de adhesivo, posteriormente comportándose como si fuese uno.
- Impresión flexográfica: Es un sistema de impresión en relieve donde el área impresa realza las zonas no impresas. La plancha, que, por ser un material muy flexible, es capaz de adaptarse a una cantidad de soportes o sustratos de impresión muy variados.
